¡ Qué prueba más bonita !. Yo creo, y lo dije después de la carrera por equipos de Medina de Campo, que debería fomentarse más este tipo de carreras, que dan a este deporte una dimensión totalmente diferente, ya que al esfuerzo personal, hay que unir el sacrificio del trabajo en equipo.
El día apareció nublado y con clara amenaza de lluvia, lo que minimizaba el calor durante la carrera pero aumentaba considerablemente la dificultad en la bicicleta.
El equipo estaba formado por Arturo, Ruben, Nacho, Uge, Molina y yo. La estrategia estaba más o menos clara, dado que Molina venia un poco tocado y yo soy, con diferencia el más lento en la carrera a pie, tenían que llegar los otros cuatro.
En función de esto, el objetivo del agua era llevar un ritmo que Nacho pudiera soportar. De tal forma, Uge abría el grupo y nos dirigía a cada una de las boyas, Ruben y Molina le seguían, y por detrás Arturo y yo, escoltábamos a Nacho. A mitad de carrera hubo un cambio de posiciones entre Molina y yo, pero el esquema no varió.
Salimos del agua, y tras una larguísima transición, cogemos las bicis. En los primeros metros, intento no perder contacto con mis compañeros, ya que yo soy el más lento en la transición y 
salgo el último. Por fin, todos con las zapatillas puestas empezamos a pedalear. Arturo abre el grupo, yo detrás, Ruben, Molina, ...... ¿y Uge y Nacho?. Sorprendentemente miramos hacia atrás y vemos a Uge tirando e Nacho que parecía que se había quedado sin fuerzas. Rápidamente me descuelgo, pensando que dado que yo no entraba en los planes para correr y a mí no se me iba a esperar, mi trabajo debía hacerlo todo en el segmento de bici. Le dije a Uge que se fuera para adelante e intento meter a Nacho en el grupo.
salgo el último. Por fin, todos con las zapatillas puestas empezamos a pedalear. Arturo abre el grupo, yo detrás, Ruben, Molina, ...... ¿y Uge y Nacho?. Sorprendentemente miramos hacia atrás y vemos a Uge tirando e Nacho que parecía que se había quedado sin fuerzas. Rápidamente me descuelgo, pensando que dado que yo no entraba en los planes para correr y a mí no se me iba a esperar, mi trabajo debía hacerlo todo en el segmento de bici. Le dije a Uge que se fuera para adelante e intento meter a Nacho en el grupo.Pero iba francamente muy tocado. Yo creo que le pasó como a mí y a Molina el año pasado. El fuerte ritmo inicial y las ganas de no descolgarse le hicieron perder fuelle y coger una pájara que todos esperábamos que fuera pasajera, pero finalmente le duró hasta el final. Sin embargo, en este momento lo único que contaba era integrarle al grupo y esperar que se recuperará. Nacho insistía constantemente en parar, pero todos esperábamos que se recuperará.
Con este handicap, veíamos como era imposible coger un ritmo de carrera adecuado, sin embargo íbamos pasando los kilómetros siempre cuidando de Nacho.
Por fin, hacemos la transición a la carrera a pie. Sin darse cuenta Arturo dejo la bici y se calzó en el lugar donde yo tenía que dejar mi bici. Esto me resto unos segundos
, que me obligaron a salir unos metros retrasados y ya no pude contactar con el grupo. Evidentemente no me iban a esperar. Sin embargo, lejos de desanimarme, me veía con fuerzas y seguía a unos 20 metros a mis compañeros, sobre todo pensando que en cualquier momento Nacho sucumbiría. Rápidamente Molina se retiró de la carrera aquejado de su ernia y se quedaron los cuatro que teníamos previsto que terminaran. Ruben me alentaba a que siguiera pensando lo mismo que yo, que Nacho no fuera capaz de aguantar. Sin embargo, antes de terminar la primera vuelta un juez me obligó a para y a dejar el chip. La carrera había terminado para mí.
, que me obligaron a salir unos metros retrasados y ya no pude contactar con el grupo. Evidentemente no me iban a esperar. Sin embargo, lejos de desanimarme, me veía con fuerzas y seguía a unos 20 metros a mis compañeros, sobre todo pensando que en cualquier momento Nacho sucumbiría. Rápidamente Molina se retiró de la carrera aquejado de su ernia y se quedaron los cuatro que teníamos previsto que terminaran. Ruben me alentaba a que siguiera pensando lo mismo que yo, que Nacho no fuera capaz de aguantar. Sin embargo, antes de terminar la primera vuelta un juez me obligó a para y a dejar el chip. La carrera había terminado para mí.Solo quedaba esperar que llegaran los cuatro y eso es lo que hicieron. Con un Nacho extenuado, pero demostrando mucha raza consiguieron llegar a línea de meta.
¿Podíamos haber elegido dejar a Nacho e intentar llegar conmigo y con Molina? Pudiera ser, pero tal y como se desarrollaron los acontecimientos creo que obramos de la mejor manera lo posible. Siempre podremos mejorar el año que viene.
Por eso digo que este tipo de carreras es muy bonito, por que sobre la marcha te obliga a tomar decisiones y cambiar de estrategias, que marcan de forma aplastante el desarrollo final de la misma, y si no que se lo pregunte a todos los equipos femeninos y en especial al nuestro.
En fin, como decía al principio sensación agridulce. Por un lado la satisfacción del deber cumplido pero con la certeza de que, en circunstancias normales, hubiéramos hecho más.
ENHORABUENA a mis compañeros, en especial a Nacho. Un placer poder correr a vuestro lado, espero poder para ayudaros.
Saludos y hasta la próxima.
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