domingo, 28 de febrero de 2010

XXI duatlón RIVAS VACIAMADRID

Si, Si, Si..... ¡ NOS VAMOS A ... GIJON !

La satisfacción del deber cumplido. El objetivo de hoy era clasificarse para el Cto. de España de Duatlón y ..... ¡ prueba superada !.

Mi participación se vio comprometida cuando la semana pasada me dió un pinchazo el soóleo que me asustó lo suficiente como para estar 5 días en paro. Cuando volví a correr las sensaciones eran buenas, pero justo el sábado, otra vez el mismo pinchazo y en el mismo sitio. Pero a estas alturas, ni el dolor, ni la ciclogéneis explosivas iba a evitar mi participación.

El día amaneció magnifico y, como empieza a ser habitual, más de una treintena de monos verdes, pululaban por las zona de boxes, la mayoría nerviosos por su debut y buscando ansiosos las respuestas a las inevitables dudas que siempre surgen cuando te enfrentas a tu primera prueba. Nos os queda nada por aprender, aunque estáis muy bien arropados.

Por fin, empieza la carrera y antes de terminar el primer kilómetro, empieza el dolor del sóleo y vienen las malas sensaciones. El circuito a pie, que fue lo peor de la organización, que por otra parte fue espléndida, no ayudaba con tantos giros que lo único que te daban era la sensación de que no avanzabas.

Cuando poco a poco veo pasar a todos los compañeros, se me olvida el dolor y, coincidiendo con la segunda vuelta, recupero las sensaciones e incluso me acerco a Uge y a Fer, que en ese momento eran mis rivales directos.

En el comienzo de la bici cojo un grupo bastante desorganizado, pero gracias a Miguel y a otro compañero que pasaba con mucha fuerza a los relevos, conseguimos separar la paja del grano y coincidiendo con el final de la primera vuelta me uno al grupo de Pedro y Fer.

Les animo a que me sigan y me lanzo a tope por la segunda bajada. La criba seguía por detrás y finalmente Fer y Pedro se descuelgan. Damos el giro y en la subida se define claramente el grupo y quien tenía interés en ir tirando, lo cual me deja en una cómoda posición, pasando a mis relevos, pero aprovechando el trabajo del resto de mis compañeros.

Poco a poco nos vamos acercando a un solitario Uge, al que finalmente, y a pesar de un fuerte e increíble frenazo en una rotonda, cogimos en la última subida.

En la entrada de la transición me veo un poco cortado al perder un par de posiciones al quitarme las zapatillas y que la entrada era un poco estrecha.

Por fin, salgo a unos 10 metros de Uge, y me mantengo con bastante holgura en el grupo, si bien, en la última subida me quedé un poco rezagado y me vi superado por un increíble Rufino, que corre como los demonios.

Las sensaciones finales bastante buenas, pero con mucha capacidad de mejora.

El ambiente ideal y con muchísima gente poniendo color verde y dando, como siempre, muchísimos ánimos. Gracias a tod@s.


Saludos y nos vemos en el Villa

sábado, 6 de febrero de 2010

Cto. de Madrid de Duatlón Cros - Tres Cantos

Rumbo a Budapest.

Por fin ha empezado la temporada, aunque el aperitivo se las traía: el duro circuito de cros del Soto de Viñuela.

Lo mejor, como siempre que empieza la temporada, es el reencuentro con lo viejos amigos a los que solo ves de carrera en carrera y, sin embargo, parece que son de tu propia familia.
El día apareció soleado, ni pizca de frío (teniendo en cuenta la época del año), y con un pequeño amago de viento que, finalmente, se quedó en eso: un amago.
Casi 300 triatletas en la salida, el doble que el año pasado. No se que va a ser en carreras donde la dureza del recorrido no ahuyente a muchos de los que no se han atrevido a venir, como por ejemplo Rivas o la Casa de Campo.
Voy a lo que voy, que me lío.
La primera carrera a pie era una incógnita. La dureza de la bici aconsejaba tomársela con tranquilidad, pero el nerviosismo de los duatlones hace que todo el mundo salga a toda pastilla, y yo no me iba a quedar atrás. Por suerte, la gran cantidad de gente y lo estrecho del recorrido, hizo que hasta la primera subida se fuera a un ritmo tranquilo. Sin embargo, en la segunda vuelta me vino un pequeño bloqueo, lo que me hizo dudar de mis fuerzas, teniendo en cuenta el poco entrenamiento que llevamos.
Con la mente puesta en la bicicleta, llegamos a la primera transición y sin continuidad para pensar, me encuentro con la primera bajada, que el otro día no me atreví a bajar. Qué inconsciente se es en la carrera, que me lanzé sin pensar y... ¡pues no era tan difícil!.
Después del pequeño llano, empieza el sin vivir de subidas y bajadas. Me encuentro suelto y subo fácil sin bloquearme la piernas, y de esta manera, llegamos a la temida cuesta de la muerte. Como todavía no iba del todo concienciado, pie a tierra y ya veremos si el próximo año puedo con ella. Y así, las tres vueltas, a mi ritmo, con exigencia pero sin llegar nunca al bloqueo, casi disfrutando del aliento de los muchos animadores y de los compañeros que jalonaban todo el trayecto.
Por fin dejo la bici y me dispongo a empezar la carrera a pie. Tras un primer kilómetro
dubitativo, las sensaciones son buenas y, poco a poco, me encuentro adelantando compañeros y con la suficiente fuerza como para aumentar el ritmo y sprintar el último medio kilómetro, que fue pletórico. Quizá podría haberme exigido más en la bici pero lo mismo ni termino bien la bici ni la carrera a pie. Teniendo en cuenta que he mejorado en casi 8 minutos el tiempo del año pasado, creo que la elección ha sido buena.
Cabe resaltar la multitudinaria asistencia de participantes del Marlins, más de 30, que nos cruzábamos a lo largo y ancho de todo el recorrido. Tiene pinta de que, este año, la mancha verde del Marlins se va a notar.
Y que decir de l@s amig@s y acompañantes que, como siempre, te empujan hasta la mismísima línea de meta. GRACIAS.
Enhorabuena a tod@s l@s que habéis subido al cajón y a tod@s l@s demás por el innegable esfuerzo.
Dentro de un par de semanas tocas Rivas, que, sobre un circuito nuevo, promete ser divertido, multitudinario y, al ser clasificatorio para Gijon, seguro que la exigencia va a ser máxima para lograr un puesto.
Gracias a tod@s y saludos