Campeonato de España de Duatlón Grupos de Edad - Monforte de Lemos (Lugo)

Comenzamos el viaje el viernes por la tarde y en un primer momento, unas llaves perdidas, unos atascos imprevistos y un nerviosismo que se iba haciendo creciente hasta que llegamos al primer punto de parada, encontranos toda la expedición y empezar a pensar en grupo con idea de afrontar la prueba del dia siguiente.

Tres chicas Ana, Ruth y Pe y tres chicos, Nacho, Cesar y yo.

Un viaje largo y un poco pesado, con el añadido de que en los últimos 30 km, con mucho cansancio acumulado, el navegador nos envió por la carretera más pestosa y revirada de la comunidad gallega.

Por fin llegamos al hotel en Sarria, ducha, cena y a dormir.

Por la mañana, nos ponemos en marcha hacia Monforte, y es fácil llegar a la zona de los boxes. En ese momento ya nos damos cuenta de que el día iba a ser muy, muy caluroso.

Cogemos los dorsales y decidimos salir con la bici a examinar el circuito de bici. Toda la carrera es muy llana, tanto a pie como en bici y no sopla el aire, así que el único handicap era el sofocante calor.

Comemos y cerramos los preparativos para entrar en boxes y poder empezar a calentar, aunque dadas las circunstancias no hacia mucha falta. Eso sí pudimos reirnos un poco con los invitados a una boda que deambulaban por el circuito y que provocaban una curiosa situación donde se mezclaban gente puy emperifollada para la boda y nosotros calentando con nuestros monos.

Por fin, sale la primera tanda y 10 minutos después nos ponemos en marcha. La primera carrera decido salir controlando y me veo rápidamente con un grupo de gente en el que, además, habí varios de mi grupo de edad, por lo que a un ritmo exigente pero cómodo decido unirme a ellos, y sorprendentemente veo que voy haciendo cada una de las 4 vueltas a 10 minutos y sin un desfallecimiento grande hasta la última vuelta que me tuve que exigir un poquito más. Al final mi mejor marca en un 10.000, bajando de lo 42 minutos.

Cogemos las bicis y, siguiendo con la tónica de no apretar mucho, voy cogiendo un ritmo cómodo y poco a poco se van descolgando algunos y recogiendo algunos por delante. Al final hacemos un grupo de 5 que rodamos bastante bien juntos, aunque a veces a arreones y a veces dejandose llevar demasiado. Esto provocó que al final toda la ventaja que llevavamos al grupo de atrás se desvaneciera casi por completo. Muchísimo calor, y gracias al avituallamiento líquido de un paisano que estaba viendo la carrera, pudimos soportar bien el esfuerzo.

Nos vamos a la T2 y cuando salgo a correr notó una fuerte subida de gemelos, pero se que es lo habitual e intento continuar a un ritmo que yo creia que era bueno. Sin embargo, veo que los de mi grupo se me van escapando y que me cogen los de atrás. Un poco desmoralizado, me fuí hundiendo poco a poco en un ritmo muy lento, monótono y sin alegría, que sólo motivado por los alientos de César y Nacho, que ya habian terminado, y de Anita en el momento de doblarme, me dieron las suficientes fuerzas para llegar a meta.

En resumen, estoy muy contento de las dos primeras carreras pero me preocupa el fracaso de la última. Creo que gran parte del problema está en que no estoy acostrumbrado a esfuerzos tan largos y al final terminó sufriendo más de la cuenta. Habrá que entrenar más. Por lo menos me llevo la satisfacción de haber conseguido puntos para el club, que era el objetivo principal.

Cabe destacar la gran actuación de Anita, que consiguió llegar segunda en su grupo de edad, y en general todo el grupo salimos muy satisfechos y con los objetivos en gran medida cumplidos.

Por la tarde cenamos en un bar cerca del hotel, los chicos nos tomamos una copa rápida y nos fuimos a dormir, intentando recuperar fuerzas donde no las había.

Por la mañana descubrimos que las chicas se habian ido a montar en bici (se conoce que no se habian esforzado lo suficiente), nosotros nos quedamos preparando el equipaje y cuando volvieron nos pusimos rápidamente camino a Madrid con miedo de que nos pudiera pillar el atasco de regreso.

Afortunadamente el viaje no se hizó tan pesado y por la tarde llegamos tranquilamente a Madrid.

Me queda un sabor agridulce de la carrera, pero como siempre la sensación placenterea de haber compartido una bonita experiencia con un gran grupo de amigos.

Gracias a tod@s y ENHORABUENA, y aunque esta vez no ha habido cla físicamente, siempre nos hemos sentido acompañados, bien con llamadas aportando animos y felicitaciones, o bien por que los llevavamos en nuestros pensamientos.

He colgado algunas fotos en la Galeria de fotos. No son muchas y algunas ya las habeis visto, pero es lo que hay.

Hasta la próxima.